9/2/05

Tara

Hace un par de meses, mis amigas y yo recogimos una gatita huesuda y enfermiza de un filtro de "estanque" (es por decir algo. Debería llamarlos ciénagas de color marrón precioso como mucho) en la Universidad. Llamé a mi madre por teléfono para que viniera a recogerla en coche y así poderla llevar a la protectora de animales.

Antes que nada, he de aclarar que yo quiero un gato, y mi madre ha estado continuamente negándomelo desde que se separó; a pesar de que teníamos dos y le encantaban. (Por si a alguien le interesa, de esos dos, uno murió, y el otro sigue con mi padre :P)

Cuando llegó mi madre, me sorprendió preguntándome si quería quedarmela. Obviamente, respondí que sí. Así que nos la llevamos a casa, con la condición de que yo pagaría el veterinario de la gata. Sí, me iba a arruinar, pero tener una bola de pelo rondando a tu alrededor todo el día lo compensa (¿A que sí, Darja? XD). Tras un mes en mi casa, mi madre se arrepintió de la decisión que había tomado, así que decidió darle la gata a mi padre, prometiendo que allí estaría bien, porque la casa es más grande y tendría compañía del otro gato. Mi padre accedió a quedársela porque mi madre le prometió ocuparse economicamente de la gata. Y hasta aquí todo más o menos bien.

El problema llega cuando mi madre lleva meses sin soltar ni un duro para Tara (que así se llama el pobre bicho) y mi padre se ha cansado de ella porque se mea por la casa. Y me jode, me jode muchísimo la actuación de mis padres en todo este asunto. Si mi madre no iba a ser consecuente con su decisión, que no la hubiera tomado y punto. Y si luego le ha prometido pagar la manutención del animal, pues que lo haga. Y que se joda si está mal de dinero: es una obligación que se autoimpuso en su día, y ahora, al igual que con su decisión, debería haberla cumplido. Cuando prometes algo no es para pasártelo por el forro diez minutos después, es para cumplirlo. En cuanto a mi padre, él nunca debería haberse quedado con una gata pequeña, porque no tiene tiempo ni ganas de educar un animal y esa es la razón de que la gata se mee donde le da la real gana. También él debería haber sido firme con sus decisiones, lo que implica educandar a la gata, no solo darle comida y cobijo. Eso ya lo hizo con sus hijos y debería haber aprendido que hace falta algo más para que un individuo se adapte a una vida en sociedad.

Últimamente mi padre no ha parado de mandar quejas sobre la gata, y mi madre no ha parado de ignorarlas. La solución que ha puesto mi madre es que YO le pase una "subvención" a mi padre de 5 euros al mes. Y no me sale de los ovarios. El problema lo han fabricado entre los dos, y no tengo porque yo, que soy insolvente por completo, gastarme el poco dinero que voy raspando de un sitio y de otro en mantener una gata que desde un principio dije de llevar a la protectora y que ni siquiera vive en mi casa(mi madre no me da ningún tipo de dinero. Me paga la comida y gracias). Y la verdad, para mantener a una gata que mi padre tiene por las malas en la casa, les he dicho que la lleven a la protectora. Me entran ganas de llorar, joder. Le tengo cariño al animal, y me parece que todo esto es absurdo e injusto.

Probablemente esta semana no vuelva a ver nunca más a mi gata, pero es joven, y en la protectora le podrán encontrar una casa. Supongo que mis padres me dirán de donar algo a la protectora (claro, no van a rebajarse a poner dinero ellos, por favor), y si no, lo haré de todas formas, que en esos sitios siempre es bienvenido algo de dinero.

Siento este post que a la mayoría ni os va ni os viene, pero quería dedicarle unas palabras a mi gata, que aunque paso poco tiempo con ella, todo lo que la concierne me afecta mucho.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué fuerte me parece, qué falta de madurez... Y luego dicen que si los jóvenes, joder... En fin, bueno, que soy Dev y estoy cabreado (un conejito rosa con el hocico rojo de ira, imaginadlo, XD).

Bueno, elfa, que si no he venido antes ha sido porque no he caído en que, pinchando sobre tu nombre en los comments podía acceder a tu pefil y a tu página... Ya sé, es de idiotas, pero jobar, acabamos de salir de un periodo de exámenes horribles...

Me voy a seguir viendo blogs, uf... XD ¡Hasta mañana!

Yo más!

Dev

Nixarim dijo...

buf... valla faena. La verdad es que hay gente que aun no asume que tener un animal es una responsabilidad muy grande. Si no la quieres asumir, no la asumas, pero si la aceptas ya no hay vuelta atrás. Porque claro, siempre es muy bonito decir eso "naaah, en la protectora estará bien", y es cierto, estará genial, pero el animal se da cuenta de que lo han echado de casa. El cambio de olores, de ambiente, de gente... se percatan. De los gatos no estoy muy segura, ya que son más independientes, pero se que en el caso de los perros pueden pillar una depresión de caballo.
Pero mira, al menos lo llevan a una protectora, no como otro gilipollas que conocía que le molestaban sus gatos y los abandonó de buenas por la calle...

Anónimo dijo...

Sinceramente, y a diferencia del resto, yo estoy con tus padres.
Es verdad que tener un animal exige una responsabilidad, pero es más cierto que el ser humano, como animal, tiene que ser autosuficiente. A todos no nos va bien siempre así que, a menudo, es necesario prescindir de nuestros caprichos: y tener un animal es un capricho.
Los gatos no han evolucionado para vivir en casas con seres humanos, sino para poder subsistir.

Es mi opinión, buena suerte al minino.

PD: Soy alérgico a los gatos, así que no me pongais verde, ciao!

Siltha dijo...

Está claro que es un capricho, pero una vez decides tenerlo, tienes la responsabilidad de cuidar de un ser vivo, y no puedes tratarlo igual que si fuese un capricho estilo móvil de última generación, que lo devuelves si no te gusta. Es un ser vivo y depende de ti porque has elegido cuidarlo. Y si no, no haberte metido en el berenjenal que sabes que es cuidar de un animal.